domingo, 14 de febrero de 2016

Dirty Valentine

No es por quitarle glamour a la cosa, y menos hoy, pero la verdad es que el amor es de lo más sucio, al menos en el cine, porque yo casi ni lo recuerdo y sino que le pregunten a los que tuvieron que limpiar todo el barro que dejaron esparcido, por todos lados, Demi y Patrick, ó los rojos pelanganos kilométricos de Julia en la bañera/piscina del Beverly Wilshire, con el asco que da eso, si no son tuyos (y tuyos también, que coño!), ó toda la cocina perdidica de harina después del revolcón de Jessica y Jack, sin contar con los cacharros que se rompieron, y peor aún, la sangre a chorros de Jennifer y Gregory en aquel final apoteósico bajo un sol de justicia, con lo difícil que es sacar la sangre de cualquier superficie y tejido, y más si está seca; y no, no se me olvida la cochinada que liaron Kim y Mickey con toda esa comida medio mordida y/ó chupada en el suelo de aquella cocina, no recuerdo en que semana, además de lo poco ecológico que es tener el frigorífico abierto más tiempo del necesario.
Y esto son sólo unos pocos ejemplos de lo sucísimo que es, el amor, pero he de reconocer que así contado (como mola el lenguaje cinematográfico) aumenta la temperatura y de que manera, porque también me viene a la mente (sucia), hay cosas que no puedo controlar, la mantequilla de Marlon y María, y la más castiza (Tulipán? ó era vaselina en tarro industrial?) de Antonio y Eusebio, bufff, "riégueme, riégueme"...creo que voy a parar de hablar de la suciedad del amor (¿porqué lo llamarán amor cuando quieren decir sexo?), porque el que acabará sucio soy yo...y me acabo de duchar.
Aunque no me engaño, porque limpiaría barro, sangre, comida chupada y pelos de otras piernas peludas en la ducha, si fueran acompañados de tanta pasión como en el cine y porque soy muy bueno limpiando los desmanes del amor, por sucios que sean...nada, que me tengo que duchar otra vez.

P.D: "Ghost", "Pretty woman", "El cartero siempre llama dos veces", "Duelo al sol", "Nueve semanas y media", "El último tango en París", "La ley del deseo" y "¿Porqué lo llaman amor cuando quieren decir sexo?".

Besos, siempre besos...con chispa!.

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