viernes, 12 de febrero de 2016

Trocitos de Instagram (1)

"Subo la escalera con desgana, cierro la puerta con un giro de llave, me desnudo y me deslizo vestido de piel bajo el cálido nórdico, adoro el tacto frío de la ropa de mi cama vacía; al poco noto unos pasos conocidos sobre la cama, alguien se acerca y aumenta el volumen de un incesante ronroneo y con un suave golpe de cabeza el gato me pide caricias, que a veces acompaña de un toque ligero de garra acolchada contra mi barba, como si no me hubiese dado cuenta de su presencia, pero como no le hago mucho caso porque ya estoy siendo arrastrado al país de los sueños, el gato se acomoda en mi costado, no sin protestar un poquito, para acompañarme en mi viaje con Morfeo, lo oigo a lo lejos ya, como acaba de limpiarse una pata y la piel del lomo, o eso creo, porque mi consciencia me empieza a abandonar como una nebulosa que apaga sonidos, luces y pensamientos conscientes, e irremediablemente me hundo en el sueño, mecido por el hipnótico ronroneo y acariciado por el suave algodón de la tela que cubre mi desnudez, me enamora ese tacto sobre mis piernas peludas y me voy, porque Morfeo me reclama impaciente y porque el tiempo resta ya tiempo de mi plácida siesta".

"Que están de moda los hipsters, las barbas y los chefs nadie ya a estas alturas lo pone en duda y aprovechando el tirón, en TV3 "la nostra" (la nuestra), se han apuntado al carro de la moda y nos han puesto a un chulazo barbudo con camisa de cuadros (eso le da toque) y puntito gracioso como cocinero de su nuevo/renovado programa de cocina ("Cuines"), y el maromo en cuestión (bufff, menudo jaco) nos cocinará cada tarde un plato sencillito y rico, rico (como diría otro reputado cocinero mediático), nada de "nouvelle cuisine", ni cosas desestructuradas de esas; y la verdad es que, y aunque yo sea de buen comer, con un cocinero cómo este yo me como lo que me cocine, el plato, la olla (jejejej, no faltan letras, list@s!) y hasta la cuchara de madera, madreee!!!.
La única crítica posible es que toca demasiado la comida al prepararla (como el otro cocinero mediático, pero no tan comestible), aunque eso fuera de la cocina no es ningún problema, es una virtud...ya lo creo, sí señor!!!.
Benvingut, Marc Ribas, al salón de mi casa...y donde tu quieras!!!".

"Y no llueve, bufff, casi tres meses sin llover, echo mucho de menos la lluvia, y eso que no es uno de mis "accidentes" (ya sé que son fenómenos, pero me voy a permitir la licencia) meteorológicos preferidos, pero sí, que le vamos a hacer, la echo de menos. Dicen que "El niño" nos la ha robado, niño!, eso no se toca, y que la cosa a corto plazo no va a mejorar, pequeños inconvenientes de vivir/nacer en el Mediterráneo, jooo, pero yo quiero que llueva a cántaros y que truene y llegar a casa empapado y enfadado (pero poco) por estar empapado y preocupado por mi ropa tendida, deseando que no se moje demasiado y maldiciendo por no tener una secadora que sólo utilizaría una vez al año; y no sé porqué, de repente, me he acordado de uno de mis ex, al que le gustaba verme llorar, más bien se ponía cachondo viéndome llorar (cada cual con sus filias) y yo acababa boca abajo mordiendo la almohada y él resoplando en mi nuca como un animal, pura ternura y sensibilidad, además de muy poca versatilidad; será por eso que me hizo llorar tantas veces y será por eso que me apetece tan poco llorar por otro ahora y tan poco morder la almohada, me robó unas pocas de mis lágrimas, no todos los "accidentes" son meteorológicos y si lo pienso, sigo sin adivinar el porqué de esta curiosa mezcla de no lluvia, lágrimas y follar, a lo mejor debería analizarlo en profundidad, pero no, que pereza!!!; tal vez sea que no puedo cantar bajito: "está lloviendo hoy, el cielo está gris, llueve fuera sí y yo no puedo salir, pero es bueno que, llueva hoy" (Barrio Sésamo fuente inagotable de sabiduría), mientras chapoteo en los charcos, con mis botas de agua, las únicas que tuve, que siempre incomprensiblemente se llenaban de lluvia (por eso no tuve más), en una época en la que sólo lloraba por crecer...no echo nada de menos llorar por nadie, aunque por fortuna lloro mucho y bien...pero si echo de menos la lluvia, jooo, que llueva YA!!!".

"Nunca quise crecer ó mejor dicho nunca tuve prisa por hacerlo, ha sido sólo cuestión de tiempo, la niñez, la adolescencia, la edad adulta, la madurez, y es que ya estoy en los "nuevos 30" ó así los llaman los que no están demasiado conformes con tener 40, pero a mi me gusta estar aquí, mi trabajo me ha costado y poder disfrutar del paso del tiempo y de todo lo que trae consigo, porque hacerse viejo (mayor, para no herir susceptibilidades, aunque yo prefiero hacerme viejo) es siempre un triunfo y no valorarlo es ser injusto con todo aquel que se ha quedado en el camino, además dicen por ahí que la vida empieza a partir de los 50 y que antes sólo se está en prácticas, yo afortunadamente empiezo a acabarlas!!!.
Aunque en realidad hoy solo cumplo 4 años y eso mola!!!".

Besos, siempre besos...con chispa!.

No hay comentarios:

Publicar un comentario